La sesión de Desafíos y Oportunidades de la Conferencia Anual, presidida por el Dr. Brett Glencross, Director Técnico de IFFO, el 24 de octubre, aborda dos temas técnicos clave: nutrición de precisión y omega-3.
¿Qué es la nutrición de precisión?
La industria ha evolucionado mucho en las últimas décadas y ahora está entrando en una era de nutrición de precisión basada en el conocimiento. “Este concepto tiene en cuenta elementos más amplios de rendimiento de producción y criterios de sostenibilidad, pero se centra en particular en la definición precisa del suministro de nutrientes y energía, así como las especificaciones de diseño del alimento balanceado necesarias para lograrlo”, afirma Dr. Jorge Dias (Sparos Lda). Los formuladores deben cubrir los requerimientos de todos los nutrientes esenciales (40), promover el bienestar de los animales, garantizar una buena ingesta de alimento balanceado y ahora también incorporar métricas de la huella de carbono.
La nutrición de precisión es necesaria por diversas razones: permite hacer un uso racional de ingredientes estratégicos, lo que evita el exceso de formulación; ayuda a controlar las variaciones en la calidad de la materia prima; y garantiza un alimento balanceado de alta calidad, así como un bajo índice de conversión alimenticia (feed conversion ratio, FCR).
El suministro de harina y aceite de pescado se ha mantenido estable durante las últimas décadas y en la actualidad son considerados ingredientes estratégicos y funcionales, ya que aportan beneficios más allá de la cobertura de las necesidades nutricionales. Los ingredientes marinos se utilizan a menudo en las primeras etapas de crecimiento, pero esto varía según la región y la especie. Es fundamental examinar más de cerca el rango óptimo de aminoácidos, en términos de digestibilidad de las proteínas e incluso del uso metabólico de las proteínas, a fin de centrarse en los costos pertinentes de los nutrientes. La industria necesita seguir perfeccionando la optimización de las especificaciones de nutrientes y centrarse en aquellos ingredientes que aportan beneficios más allá del suministro de nutrientes básicos. Esto incluye aumentar la variedad de ingredientes disponibles y centrarse en alimentos balanceados más eficientes mediante una definición más precisa de lo que necesitan los animales. “La industria necesita mejorar con los recursos existentes, centrarse en las tendencias emergentes y los desafíos crecientes”.
Llenar las lagunas de datos en los ingredientes marinos
De acuerdo con las perspectivas ambientales sobre los alimentos balanceados, pero ahora centrándose en las lagunas de datos sobre la evaluación del ciclo de vida (lifecycle assessment, LCA), Jorge Díaz Salinas de Skretting generó conciencia sobre qué datos se necesitan para llevar a cabo la LCA siguiendo las metodologías apropiadas del GFLI (Global Feed Lifecycle Assessment Institute). Para Skretting, estos datos son necesarios porque los exigen los organismos reguladores, los clientes de alimentos balanceados los piden cada vez más, los supermercados ahora exigen esta información a través de objetivos basados en la ciencia; y, por último, es necesario cumplir con las certificaciones. El GFLI tiene datos promedio aproximados para harina y aceite de pescado de 10 países, con datos específicos para 15 especies diferentes (13 pescado entero y 3 recortes) principalmente de Noruega, Perú, México y Estados Unidos. Los proveedores de ingredientes marinos necesitan trabajar en sus propios datos primarios y hay muchas lagunas que la industria debe llenar.
Las materias primas utilizadas en los alimentos balanceados son el principal impulsor de las emisiones del sector de alimentos balanceados, por lo que el seguimiento y la reducción de esa huella solo pueden lograrse con los datos correctos. Para calcular la huella de carbono, la huella hídrica y todas las demás huellas requeridas como parte del proceso de LCA, se necesitan datos de varias etapas del proceso de producción de ingredientes, incluidas la captura, el transporte, el procesamiento y el almacenamiento. La información requerida incluye detalles como los tipos de embarcaciones utilizadas, su construcción, el uso de refrigerantes y el combustible utilizado en la operación de pesca, y todo esto antes de considerar lo que sucede una vez que el pescado llega a la costa para el proceso de producción de harina y aceite. “Los ingredientes marinos tienen una huella de carbono baja en comparación con los ingredientes terrestres. Representan el 10% de la huella de carbono de Skretting. Sin embargo, necesitamos una visión más global que tenga en cuenta otros parámetros, como los impactos en la biodiversidad”.
La importancia de la procedencia de los productos
El Dr. Wesley Malcorps, del Instituto de Acuicultura de la Universidad de Stirling, destacó la necesidad de datos y afirmó que cómo comprender dónde y cómo se produjeron los productos del mar es importante para verificar el estado de esas materias primas en relación con las leyes sobre seguridad alimentaria y prácticas de producción. No obstante, esta información también es importante para la historia de la LCA, ya que el origen de la materia prima juega un papel importante en cómo se asignan las cargas ambientales. “Es necesario definir primero qué es la sostenibilidad y decidir qué es lo primero que queremos conseguir. La sostenibilidad es un viaje, no un punto final, y decir que algo es sostenible puede limitar futuras mejoras”. La sostenibilidad no se refiere solo al medio ambiente, sino que incluye muchos aspectos, como los sociales y económicos, así como los indicadores de bienestar de los peces. Si no incluimos todos, realmente no estamos hablando de sostenibilidad.
La trazabilidad es una parte clave si queremos entender de dónde provienen las cosas, saber cómo avanzamos y transferir esa información a lo largo de la cadena de suministro a las partes interesadas y a los consumidores finales. Las empresas necesitan identificar elementos de datos clave y quién los necesita, incluidos los consumidores finales, para informar sus elecciones e impulsar el cambio en el mercado. Los alimentos balanceados funcionan de manera diferente según las categorías de impacto utilizadas y las empresas deben comprender las compensaciones entre los diferentes impactos ambientales y sociales, así como entre los entornos marino y terrestre. “Estamos interesados en los ingredientes marinos que tienen una huella de carbono baja en comparación con los ingredientes vegetales. Sin embargo, si vamos a producir ingredientes marinos más sostenibles, necesitamos utilizar más subproductos. La trazabilidad es importante para garantizar que los recursos de subproductos provengan de recursos seguros y sostenibles”.
El uso de una red compartida a lo largo de la cadena de suministro es el camino a seguir. Esto podría hacerse mediante el uso de dispositivos IoT, con una base de datos confiable que no esté administrada por una única autoridad, que sea inmutable, descentralizada y difícil de piratear. Es importante señalar que, en una red compartida, los participantes necesitan incentivos para compartir datos y necesitan sentirse protegidos sin estar vigilados.
Propiedades del omega-3 en los seres humanos
En cuanto a la nutrición humana, el profesor Philip Calder, de la Universidad de Southampton, exploró las lecciones aprendidas de la fisiología humana del omega-3. El EPA y DHA proporcionan propiedades biológicas especiales y únicas a los humanos, cambiando la cualidad física de la membrana y su función, modificando la funcionalidad y la estructura de proteínas y lípidos de una manera óptima. Esto cambia los patrones de expresión genética, alterando el momento en que se producen las proteínas, las respuestas y la activación celular y el ensamblaje de la “balsa” en la membrana celular, lo que afecta la forma en que funcionan las proteínas y las membranas celulares. El beneficio general varía entre los diferentes órganos del cuerpo, incluida la ayuda a la función visual, la función cognitiva, el metabolismo, la regulación de la inflamación, las respuestas inmunes, el estrés oxidativo, la coagulación sanguínea, la función de los órganos (por ejemplo, el corazón, el hígado, los pulmones, los músculos) y la cicatrización de heridas.
Requisitos de omega-3 en el pescado: requisitos esenciales frente a los deseables
Los beneficios de EPA y DHA para los humanos son bastante similares para los peces, razón por la cual se presta más atención a su inclusión en los alimentos balanceados. El profesor Douglas Tocher, de la Universidad de Shantou, presentó la evolución de los alimentos acuícolas y señaló que las dietas de los peces de cultivo son dietas altas en energía (grasas y lípidos) para promover el crecimiento (ahorro de proteínas). Sin embargo, el uso cada vez mayor de materias primas vegetales terrestres, como el aceite de canola, está aumentando el contenido de 18:2n-6 y alterando la proporción n-6 y n-3 de los alimentos balanceados. La mayor parte de la investigación sobre los impactos en los requerimientos de ácidos grasos esenciales se centra en el salmón del Atlántico y se basa en la escala del cultivo de salmón, con especial atención en la importancia del aceite de pescado en los alimentos balanceados para el salmón.
En los últimos 20 a 25 años, las formulaciones de alimentos balanceados para salmón se han caracterizado por un mayor contenido de lípidos (grasas) en la dieta y una mayor proporción n-6/n-3 de AGPI. En el salmón de cultivo, los requerimientos de AGPI-CL omega-3 oscilan entre el 5 y el 8% del total de ácidos grasos (total fatty acids, TFA) en condiciones de “laboratorio” (1-3% de la dieta). Sin embargo, en condiciones difíciles (de granja), los requisitos específicos de EPA y DHA están más cerca del 10% de TFA (alrededor del 2% al 3.5% de la dieta). Los niveles de inclusión difieren mucho en las especies marinas y se ven afectados por el equilibrio de AGPI n-6/n-3 y los desafíos ambientales.
Un enfoque más allá del EPA y el DHA
Tone-Kari Ostbye, científico de Nofima, analizó en profundidad el mundo de los ácidos grasos monoinsaturados de cadena larga (long chain mono-unsaturated fatty acids, LC-MUFA) y los ácidos grasos poliinsaturados de cadena muy larga (very long chain polyunsaturated fatty acids, VLC-PUFA). Se trata de ácidos grasos que se encuentran en varios tipos de aceites de pescado dependiendo de factores como la especie, la estación, la edad, la ubicación geográfica y el estado fisiológico. Solo una pequeña parte de los aceites de pescado constituye VLC-PUFA (aprox. 0.5% del total de ácidos grasos), que son ácidos grasos con una longitud de cadena de ≥ 24 átomos de carbono. Las funciones fisiológicas de los VLC-PUFA no se comprenden completamente, pero en estudios recientes sugieren funciones en tejidos como el cerebro, la piel, los testículos y los ojos. Los LC-MUFA, por otro lado, son ácidos grasos con entre 18 y 24 átomos de carbono. Las funciones conocidas de los LC-MUFA están relacionadas con una mayor oxidación de grasas, una mejor síntesis de ácidos grasos omega-3 y una reducción de la inflamación, pero se desconocen los mecanismos. Hasta la fecha, las investigaciones indican que los VLC-PUFA y LC-MUFA tienen una amplia gama de funciones fisiológicas en el cuerpo importantes para la salud, y los aceites de pescado son fuentes valiosas de estos ácidos grasos.
¿Es el aceite de pescado solo una fuente de omega-3? Este fue el tema central de la mesa redonda, moderada por el Dr. Brett Glencross, en la que participaron Tone-Kari Ostbye y Douglas Tocher.
Hay muchos ácidos grasos diferentes en el pescado, que no son solo una fuente de energía: incluidos los ácidos grasos monoinsaturados de cadena larga (LC-MUFA) y los ácidos grasos poliinsaturados de cadena muy larga (VLC-PUFA). Estos son ácidos grasos que se encuentran en varios tipos de aceites de pescado. “El EPA y DHA son moléculas biológicamente muy activas. Su mecanismo es bien conocido a la hora de modular la respuesta antiinflamatoria. Los demás aspectos son menos conocidos ”, afirmó Doug Tocher. Estos ácidos grasos tienen algunos efectos muy positivos en la piel, incluidas algunas influencias importantes en la cicatrización de heridas que Nofima ha explorado en sus estudios con el salmón. El principal impacto parece estar relacionado con las respuestas antiinflamatorias que confieren estas moléculas.
¿Es lo mismo comer pescado rico en omega-3 o tomar suplementos de omega-3? “La digestibilidad es el primer criterio que debe considerarse. El problema con las cápsulas de aceite de pescado es que debes tomarlas con alimentos para estimular el proceso de digestión. Una vez que el EPA y el DHA han sido digeridos y absorbidos en el cuerpo, puede que no haya diferencia ”, comentaron los panelistas.